La Regla de los Dos Minutos es una técnica de productividad y organización que busca mejorar la eficiencia en la realización de tareas pequeñas y evitar la acumulación de tareas pendientes.

La idea principal detrás de esta regla es que, si una tarea se puede completar en menos de dos minutos, es mejor hacerla de inmediato en lugar de posponer.

 Créeme esta sencilla pero poderosa estrategia puede ayudarte a mantener el control de tu tiempo y aumentar tu productividad diaria.

Fundamentos de la Regla de los Dos Minutos:

  1. Rapidez en la toma de decisiones:

Al decidir completar una tarea que requiere menos de dos minutos, evitas gastar tiempo adicional pensando en cuándo hacerla y te enfocas en acciones concretas.

  1. Reducción de la carga mental:

Al realizar tareas pequeñas de inmediato, liberas espacio mental para concentrarte en asuntos más importantes y complejos.

  1. Evitar la acumulación de tareas pendientes:

 Abordar tareas rápidas de inmediato evita que se conviertan en una lista interminable de pendientes, que lo qué hacen es generar más estrés. Por ejemplo, al terminar tu trabajo deja el escritorio, la cocina o tú área de trabajo, limpia y ordenada.

Ejemplos de aplicación de la Regla de los Dos Minutos:

1. Responder correos electrónicos sencillos. Si recibes un correo que requiere una respuesta breve o una acción simple, responde o actúa en consecuencia en el momento.

2. Organizar documentos digitales: Cuando descargues un archivo o documento, dedica dos minutos a archivarlo en la carpeta adecuada para evitar la acumulación de archivos desorganizados.

3. Hacer la cama: Este simple acto puede llevar menos de dos minutos y te ayuda a iniciar el día con una sensación de logro.

4. Devolver llamadas perdidas. Si ves que alguien te ha llamado y puedes resolver el asunto en menos de dos minutos, devuelve la llamada de inmediato.

5. Anotar eventos en el calendario: Si recibes una invitación para un evento o una reunión futura, tómate dos minutos para añadirlo a tu calendario, para evitar olvidos.

6. Limpiar pequeños desórdenes: Si encuentras un espacio desordenado, toma dos minutos para organizarlo, antes de que el desorden se acumule, por ejemplo: lavar una taza de café o ir acomodando los platos sucios que vas a lavar al terminar de comer, regresar los objetos a su lugar, coser un botón en el momento que se cae.

7. Enviar mensajes de agradecimiento: Si alguien te hace un favor o te brinda ayuda, tómate un par de minutos para enviar un mensaje de agradecimiento.

8. Realizar estiramientos: Tómate dos minutos para hacer algunos estiramientos rápidos para relajar tu cuerpo y mejorar la circulación.

9. Tomar notas rápidas: Si tienes una idea o un pensamiento que deseas recordar más tarde, anótalo rápidamente en una libreta o en una aplicación de notas en tu dispositivo. Anotar los datos de un contacto en el celular y no en un papel que se puede perder.

10. En la noche , recoge la ropa de una vez, poner la ropa sucia en el cesto y en su sitio lo que debe ser colgado o los zapatos en su lugar.

Si tienes niños deja mochilas, llaves del coche, sweaters listos para salir en la mañana, te evitarás enojos y contratiempos.

Recuerda… que el objetivo de la Regla de los Dos Minutos es abordar rápidamente tareas pequeñas y sencillas que, si se dejan para después, pueden acumularse y generar una carga innecesaria en tu lista de pendientes, que generan más estrés, si te llevan más tiempo hazlo después.

Al adoptar esta práctica, verás cómo tu productividad y organización mejoran,  te sentirás más capacitado para enfrentar retos más complejos.

¡Ponla en práctica y experimenta sus beneficios en tu vida diaria, te vas a sentir aliviado o aliviada, además de que vas a sentir más feliz, al lograr mejorar en el orden y trabajar con eficiencia y seguramente reducir el estrés cotidiano.

Lo tengo comprobado y los alumnos siempre nos reportan lo que le realmente les ha ayudado.

¡VALE LA PENA LOGRARLO COMO HÁBITO!